Pugs con Comportamiento Agresivo

El pug o carlino es una buena mascota familiar que se adapta mejor a una vida en interiores. Juguetón y encantador, con un temperamento feliz, esta raza de perro se lleva bien con todo el mundo. Sin embargo, algunos pugs pueden mostrar un comportamiento agresivo debido a su naturaleza animal. Un pug agresivo puede gruñir y morder a la gente, perseguir y asustar a otros animales, entre otras conductas amenazantes. Los dueños de pugs debe mostrar liderazgo y desaprobar el comportamiento agresivo, incluso en los cachorros jóvenes. Este comportamiento no sólo es molesto y perturbador, también es peligroso y puede salirte costoso.

Para detener la agresión es necesario comprender la naturaleza de manada de tu mascota y tomar las medidas acordes. Aquí te presento algunas técnicas y consejos útiles que pueden ayudarte a criar un perro adiestrado y sociable.

Entrenamiento de obediencia

Un entrenamiento de obediencia a través de comandos y otras técnicas pueden modificar el comportamiento del pug y dar al amo un mayor control. Sin esta formación, el dueño difícilmente podrá ocuparse de cualquier comportamiento agresivo del perro. Lo primero es determinar el nivel y tipo de agresión del pug y luego usar los medios posibles para manejarlo. Por ejemplo, el dueño puede emitir un comando cuando el pug esté mostrando un comportamiento agresivo y la mascota obedecerá y se calmará.

Cualquier pug puede trastornarse bajo ciertos factores, los comandos de obediencia deben practicarse cuando el pug se vuelve agresivo sobre estos factores. Con el tiempo el perro será capaz de responder al menos a las órdenes básicas y ya no mostrar agresividad hacia las personas u otros perros. El entrenamiento de obediencia enseña al perro a comportarse de una manera específica cada vez que se da una orden.

Entrenamiento de socialización

La falta de socialización puede conducir a que un perro sea agresivo. Por ejemplo, un pug que se lo llevaron de su camada en una etapa temprana puede no haber aprendido las habilidades sociales esenciales que le permitan coexistir pacíficamente con otros perros. Esta falta conduce a un perro que es desconfiado, temeroso, y difícil de entrenar y de manejar. El dueño debe hacer que el pug se sienta seguro y protegido al tiempo que mantiene su posición como líder de la manada.

Criar un pug en un ambiente cálido, donde se alimente adecuadamente, juegue, sea tocado con frecuencia, y allá comunicación, le puede ayudar a relacionarse con las personas con mayor eficacia. Es importante enseñar al pug a mantener la calma cuando se le da de comer, ya que es el momento en que los perros se vuelven más agresivos. Además, exponer al pug a otros animales puede ayudar a hacerlo más amable, feliz y sociable.

Ejercicio adecuado

Lograr el ejercicio correcto y adecuado para el pug es crucial para una formación efectiva. Sin embargo, los pugs son a la vez pícaros e inteligentes, y se aburren de actividades repetitivas. Algunos juegos en la casa y una caminata diaria debe ser suficiente para aliviar su aburrimiento. A medida que el entrenamiento avanza, el dueño debe incluir comandos de obediencia para deshacerse de la conducta agresiva. Es importante controlar la respiración del pug, sobre todo en lugares de clima cálido, debido a que su corto hocico puede causar muchos problemas respiratorios durante el ejercicio.

Medidas preventivas

El comportamiento agresivo en pugs puede ser prevenido y controlado a través de un trato correcto, el adiestramiento, y otros métodos de entrenamiento que son específicos a la naturaleza de la agresión. El miedo y la agresión pueden prevenirse con el entrenamiento de obediencia y la socialización, especialmente en la etapa de cachorro. Castrar al pug en la adolescencia también puede ayudar a minimizar los casos de agresión.

Asesoría veterinaria

Si el pug actúa de forma agresiva sin motivo aparente, es importante que lo lleves al veterinario con el fin de identificar cualquier dificultad física que pudiera estar provocando este comportamiento. En muchos casos, la causa de la conducta agresiva suele ser el dolor, y los perros muestran este comportamiento para ocultar ese dolor, ya que es un signo de debilidad. El veterinario puede determinar la causa del malestar y al solucionarlo se puede eliminar el comportamiento agresivo. Si ese no es el caso, los dueños deben buscar la ayuda de un especialista en comportamiento que pueda asesorar sobre los métodos de modificación de conducta.

Estas son algunas de las formas que los dueños de perros pueden utilizar para entrenar a un pug agresivo. Es posible criar un pug bien entrenado si tienes la paciencia, constancia y dedicación para hacerlo.

Categorías: Adiestramiento,Razas

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